Autor: Redacción Lima 2019 Lima, 25 de Agosto de 2019

LA MARAVILLOSA HISTORIA DETRÁS DEL ABRAZO ENTRE YULIANA BOLÍVAR Y FRED VILLALOBOS

La medallista panamericana participó como voluntaria en Lima 2019, para estar cerca de su familia del Judo. El afecto entre ambos demuestra que el deporte es un gran motor de la amistad.

Abrazo

Los lazos afectivos entre los deportistas pueden ser súper intensos, a pesar de no haber una relación sanguínea mutua. El abrazo entre la judoca peruana Yuliana Bolívar (medallista en los Juegos Panamericanos) con Fred Villalobos, medalla de bronce en los Parapanamericanos, demuestra que el cariño genuino basta con sentirlo en el alma.

Esta amistad surgió, hace dos años, durante los entrenamientos en la VIDENA, y esta mañana los juntó en un episodio glorioso del deporte peruano. Bolívar, quien participó como voluntaria en el certamen de Judo, felicitó al Para deportista nacional ni bien bajó del tatami y se confundieron en una imagen cautivante. La discapacidad visual de Villalobos no le impidió sentir un afecto similar.

“Fred es mi gran amigo, siempre lo ha sido, desde que nos conocimos hace dos años, cuando ninguno de los dos habíamos ganado nada. Esa cercanía generó un sentimiento mutuo y, por ello, me dio esa demostración de cariño, cuando se percató de mi presencia. Admiro a Fred, porque es un gran ser humano y me alegra que ahora compartamos una medalla de bronce en unos Juegos”, indicó la judoca. Fred Villalobos demostró que el Perú tiene garra en los Parapanamericanos Lima 2019

Desde que llegó de Venezuela, Fred es uno de los integrantes de la gran familia peruana que la judoca pudo cultivar en este país. “Estoy orgullosa de ser peruana. El hecho de haber conseguido un logro deportivo no significa que deje de ser humano. Siempre voy a apoyar a mis amigos del Judo, porque me abrieron su corazón en los momentos que más lo necesitaba”, añadió la deportista nacional.

Al final de la jornada en el Polideportivo 2 de la VIDENA, Yuliana fue abordada por los aficionados, quienes le pidieron autógrafos y fotos para el recuerdo. “No esperaba tanto cariño de la gente y es gratificante para mí que, a parte de tener respaldo de mi familia del Judo, también cuento con el de los peruanos. Eso vale más que cualquier medalla”, finalizó.