El Legado social promueve la promoción de los valores deportivos que incentivan un estilo de vida saludable y que ayudan a combatir problemas sociales multisectoriales. Lima 2019 demostró de lo que son capaces los peruanos cuando se trabaja en equipo y con unidad.
También, parte importante del legado ha sido poner en alto nuestra inmensa diversidad cultural expuesta a nivel nacional e internacional en las ceremonias de inauguración y clausura. Con ello, se contribuye a generar un cambio cultural de cara al Bicentenario de la Independencia, afianzando los valores del deporte y forjando una nueva visión de país y de ciudadanía.
Los Juegos han servido como una semilla para lograr una gran transformación social. Fue la primera vez que se puso en agenda el deporte paralímpico y fue la ocasión para que deportistas migrantes nacidos en otros países compitieran bajo la bandera del Perú.
Bajo el paraguas del gran legado social, en el Proyecto Especial Legado trabajamos por disminuir la desigualdad, creando - ya sea a través de la infraestructura o de la alianza con socios estratégicos - acceso a oportunidades para todas las personas sin importar su género, etnia, capacidad, edad o nivel socio económico.
Asimismo, buscamos aportar a la construcción de una renovada identidad y sentido de pertenencia hacia la marca Legado. Los valores del deporte deben seguir siendo una herramienta educativa para visibilizar los beneficios de la recreación, la actividad física y la cultura en pro de la construcción de una sociedad más equitativa y una cultura ciudadana basada en el respeto, la inclusión y la diversidad.